Hace unos días se dio a conocer a través de medios de comunicación brasileños sobre la muerte de uno de los voluntarios al programa de ensayos clínicos que está liderando la farmacéutica de origen inglés AstraZeneca en conjunto con la universidad de Oxford, dicha muerte fue confirmada por el medio informativo carioca O Globo. Según dicho informe el voluntario falleció el pasado 15 de octubre, y las autoridades brasileñas tomaron nota de dicho fallecimiento y evaluaron las causas de la muerte de esta persona en conjunto con los desarrolladores de la vacuna.
La persona habría estando participando en el protocolo de ensayo clínico internacional de la vacuna desarrollada por AstraZeneca y que usa una versión debilitada de un adenovirus, a principios del mes de septiembre los ensayos en el Reino Unido y en otras partes del mundo se detuvieron temporalmente después de que una mujer en el grupo del ensayo clínico desarrollara síntomas de una afección neurológica. Sin embargo días después un comité de científicos independiente que supervisa el ensayo concluyó que era poco probable que el caso de la mujer tuviera relación con la vacuna suministrada, por lo que los ensayos se reanudaron en todo el mundo a excepción de Estados Unidos.
Aunque aún no se han pronunciado de forma oficial las autoridades brasileñas, según el medio de comunicación O Globo el voluntario estaba en el grupo placebo, lo que significa que no recibió la vacuna experimental, dicha información fue difundida igualmente por Bloomberg News.
Estados Unidos, Brasil, India y México han sido de los países donde se concentra la letalidad más elevada a causa del coronavirus, aunque se estima que la cifra es aún más alta según estimaciones de expertos en estadística.
