Mucho se hablan del equilibrio entre cuerpo, mente y alma, pero nadie nos explica realmente cómo lograr esto, por ello Alondra Morales, coach laboral y de vida brinda las siguientes recomendaciones para tener una vida más ligera.
En la actualidad existen muchas maneras para lograr un equilibrio, ahora que estamos próximos a entrar en la primavera, estos tips te ayudarán para recibirla y lograr esa estabilidad hoy en día tan necesaria:
1.- Respira profundo 5 veces antes de levantarte de la cama: te ayudará a relajarte y bajar la tensión.
2.- Aliméntate sanamente: para tener un buen equilibrio con tu cuerpo y tener mejores defensas. Acércate con los especialistas de la salud.
3.- Ejercítate al menos tres veces a la semana: tener una buena condición, reforzará tus pulmones y tú fuerza. También es una manera de despejar la mente.
4.- Medita: dedícate una hora para meditar, ya sea que lo implementes para dormir o en alguna hora del día.
5.- Duerme tus 8 horas: el descanso es súper importante, cuando lo hacemos el cuerpo se recupera, ayuda a la memoria y mejora el sistema inmune, así como también se recupera la energía.
Puedes leer, correr, escribir, hacer alguna manualidad o también aprender a hacer algo nuevo, es importante que una vez al día hagas algún pasatiempo que te guste.
Beneficios de la salud emocional
- Autoconocimiento: saber qué queremos de la vida, nuestros propósitos y planes a futuro para ayudarnos a tomar mejores decisiones.
- Rendimiento laboral: tendremos una mejora significativa en la productividad.
- Reducción del estrés, ansiedad y depresión.
- Mejora en las relaciones interpersonales: favoreciendo el bienestar psicológico.
- Aumenta la motivación y alcanzar nuestros propósitos y metas.
- Mejora la autoestima y confianza.
Las emociones están ahí y hay que aceptarlas.
No aceptarlas significa aumentar nuestro nivel de intensidad. El solo manejar emociones negativas es sufrirlas una y otra vez, ocasionando angustia y afectando negativamente física y emocionalmente
Gracias a la Inteligencia Emocional podemos dominar nuestra relación con los demás y con nosotros mismos de una manera significativa.