*Por: Carlos Caponera, Chief Marketing Officer, Teletrac Navman
La presión por optimizar los costos y la eficiencia sigue afectando a los gestores de flotas comerciales de todo el mundo, pero en el contexto de la actual coyuntura económica resulta cada vez más exigente. En una encuesta reciente realizada a más de 1.800 operadores de flotas, Teletrac Navman descubrió que el aumento de los costes de combustible (39%), las perturbaciones debidas al impacto del COVID-19 (32%) y la presión sobre la cadena de suministro (31%), suponían los mayores retos
Aunque estos obstáculos siguen estando en el camino de los propietarios de flotas, al menos a corto y medio plazo, los avances tecnológicos están teniendo un impacto muy positivo en la reducción de los costos y la eficiencia operativa. Una de estas soluciones que está allanando el camino para el mercado de las flotas comerciales -específicamente la telemática- y ayudando en la búsqueda de flotas más eficientes y rentables, es la inteligencia artificial (IA). Esta tecnología
inteligente puede utilizarse para analizar e interpretar los datos telemáticos en tiempo real, con el fin de ofrecer información valiosa y práctica que los gestores de flotas puedan convertir en decisiones informadas que superen las adversidades y tengan un verdadero impacto.
Las plataformas telemáticas tradicionales requieren que los usuarios dediquen una cantidad excesiva de tiempo a analizar informes digitales para identificar oportunidades de mejora. Sin embargo, las plataformas basadas en IA y aprendizaje automático eliminan por completo el periodo de análisis de datos para los usuarios. Como resultado, los gestores de flotas disponen ahora de una mayor sensación de productividad y control.
Soluciones como TN360 de Teletrac Navman permiten a las operaciones empresariales reconocer patrones de eficiencia y, lo que es más importante, de ineficiencia, para poner de relieve al instante las deficiencias y las oportunidades. Entre las áreas de análisis se incluyen la planificación de rutas, los flujos de trabajo logísticos, el mantenimiento, el cumplimiento de las normativas, el comportamiento de los conductores y la gestión del combustible.
El abuso del frenado durante la conducción y el exceso de velocidad son sólo dos áreas en las que el comportamiento del conductor puede afectar directamente al consumo de combustible. Otra es la conducción peligrosa, como las distancias de manejo inseguras, los frenazos bruscos o tardíos y las curvas, que pueden aumentar la probabilidad de colisión. Aunque el combustible sigue representando un alto porcentaje de los costes operativos totales de una flota, los beneficios
económicos derivados de la reducción de los incidentes en carretera y las consiguientes primas de seguros e incluso reclamaciones fraudulentas son más que beneficiosos para los gestores de flotas que se encuentran en apuros.
Las plataformas avanzadas de gestión de flotas, con capacidad para integrarse con las cámaras inteligentes con inteligencia artificial, ofrecen una visión tanto del interior como del exterior del vehículo para proporcionar a los gestores una imagen completa de las carreteras. Estos datos pueden transmitirse a los conductores en tiempo real, así como ayudar a elaborar programas de formación y recompensas para quienes demuestren una conducción segura. Una estrategia que
también ayuda a retener a los conductores y a hacer que se sientan más valorados.